La llegada de diciembre trae consigo la cercanía de las fechas navideñas y todo lo que esto conlleva: regalos, reuniones familiares, cenas de amigos y empresa, y las tradicionales cestas de Navidad.
Acertar siempre no es tarea sencilla, pero sí que existen ciertos aspectos que garantizan el éxito de una buena cesta de Navidad y la satisfacción absoluta de aquellos que la reciben. Y uno de esos aspectos es el vino.
Vino para cesta de Navidad
El vino se ha convertido en un imprescindible de este tipo de obsequios. Pero, al mismo tiempo, surgen nuevos interrogantes: ¿Cuál elegir? ¿Cómo sorprender a empleados y colaboradores?
El vino tinto es fundamental
El vino tinto es un imprescindible en las cestas de Navidad. Por lo general, suele haber presencia de un crianza como el Marqués de Villalba Crianza, que tras seis meses en barrica de roble y seis en botella representa una gran elección.
El tinto, especialmente el crianza, suele asociarse al jamón ibérico de bellota y los embutidos, otro producto fundamental en las cestas de Navidad. Aunque los tintos jóvenes también funcionan bien con estos maridajes.
Vino blanco y rosado
Una buena cesta de Navidad busca siempre la diferenciación. Por ello, es importante probar diferentes combinaciones y salir de los clásicos. Incorporar vinos blancos y rosados es una buena forma de hacerlo.
Nuestro Señorío de Villalba Rosado es un acierto garantizado en cuestión de rosados. En materia de vinos blancos, puedes optar por diferentes opciones según el maridaje que acompañe. Te aconsejamos echar un vistazo a nuestros vinos.
Maridajes para cesta de Navidad
Lo mejor de una cesta de Navidad es la variedad de productos que ofrece y, al mismo tiempo, la forma en la que todos estos se complementa. Y ya que hemos elegido vino, ahora toca ver de qué acompañarlos.
Ibéricos y embutidos
Para los tintos ya hemos dejado claro que lo mejor es el embutido y la chacina, siendo el jamón ibérico su mejor pareja de baile. Eso sí, no deberías dejar de probar a disfrutarlos con una copa de rosado.
Quesos
El queso también es un habitual de las cestas, maridando muy bien con los vinos blancos e incluso los rosados si se trata de quesos frescos o blandos. Los quesos más duros o grasos también combinan con el crianza que hemos recomendado.
Conservas
Uno de los últimos productos en sumarse a las cestas ha sido la conserva: patés, foies y una amplia gama de soluciones que hacen las delicias de todos los comensales y que acostumbran a acompañar a los vinos blancos y dulces.
Dulces
¿Y qué es una Navidad sin turrones, mazapanes o pestiños? Si bien son productos que suelen disfrutarse con licores como el orujo, también van muy bien con vinos dulces.
¡Esperamos haberte ayudado a preparar tus cestas de Navidad!